LA CIUDAD DEL PACIFICO
Después de la Anunciación del Océano Pacifico en 1993, se vino generando un gran proceso de conurbación entre Pichilemu, Rancagua, Machali, Santiago, Valparaiso, en el momento de La Anunciación, la ciudad estaba construyendo sus bordes, en un proceso de doscientos años, de grandes esfuerzos de energía, de construir las líneas del tren, de fríos intensos, de segundas guerras, de caminos de tierra, luego, sin siquiera habernos dado mucha cuenta, millones de llamados de celulares, gente hablando, escribiendo, millones de imágenes, turistas en paracaídas, en tablas, en millones de de autos.
Cual será el próximo paso, las autopistas se rebalsan, los niños andan poco en bicicleta, todo con mucha vanidad. Hay que volver a abrir los planes reguladores con mucha urgencia, se necesita densidad, altura y avenidas, la ciudades no deben expandir más sus limites urbanos, de los bordes al centro, la distancia debe ser, no más, que veinte minutos en bicicleta, teniendo en cuenta las pendientes para los alcantarillados, el poder de los controladores del agua.
Mientras en la maraña telefónica, se escucha la conversación de una tipa con otra tipa, de una tipa con un tipo y de un tipo con otro tipo, de tipas de tipos. Hablando y comprando.
Deben de haber, a lo menos, dos estacionamientos por auto, el doble para bicicletas.
La tipa de dijo a la otra tipa: Voy a salir de viaje, la tipa al tipo: Quiero viajar.
Rancagua debe tener un aeropuerto, Pichilemu otro, Valparaiso ya lo tiene y Santiago también.
El tipo con otros tipos fueron a ver fútbol con vino tinto, estaban todos borrachos.
